Otra nueva ficción presupuestaria para 2018
Con más de dos meses de retraso respecto al 15 de octubre que establece la Ley de Haciendas Locales, para la aprobación inicial del presupuesto, y con este ya van tres presupuestos en los que el bipartito no empieza el año con las cuentas definitivamente aprobadas –si no hay alegaciones entrarán en vigor el 22 de enero-.
Aparentemente en el presupuesto crecen las inversiones, con micro actuaciones, y el gasto social, sin embargo y tal y como se ha venido reiterando en estos dos años y medio, la realización de la inversiones es bajísima y las principales inversiones no llegan a iniciarse, y con el gasto social sucede lo mismo.
Así en el propio expediente presupuestario figura la ejecución hasta el 14 de diciembre de 2017 y de los tres principales proyectos inversores que suman casi un millón de euros han ejecutado solo 12.000€, un 1% de lo que se habían comprometido.
De los 300.000 de la partida fantasma ideada por el alcalde no se ha ejecutado nada, el 0%, es más, nunca se supo a qué iba destinada. Era la única gran inversión a costa de la Generalitat, en la fase 2ª del Proyecto de Biomasa de los 315.000€ previstos se ha ejecutado el 0% y en la tercera gran actuación de los 350.000€ previstos para el techo del polideportivo municipal han hecho el 3,5%.
Si en materia inversora tienen estos presupuestos un problema de credibilidad, en los programas sociales es aún mayor, de los siete programas específicos para 2017, cuatro ni se han iniciado; el Plan de Integración de Inmigrantes, Cooperación Internacional, Cooperación Social y Acogimiento Familiar tienen 0% de ejecución y otros dos, el de pobreza energética un 25% y prestaciones económicas el 28%. Y el año acaba con un recurso social menos, el Colegio de la Resurrección para menores que cerró Mónica Oltra con las invenciones de mendicidad y comida caducada.
Los crecimientos más destacados son los referidos a los Altos Cargos que crece un 36% y con los que se retribuye a parte del equipo de gobierno, la de Gastos Diversos que aumenta un 43% de 634.000 a 910.000€ lo que impide el control de la oposición y favorece tanto la discrecionalidad como el oscurantismo, repiten el coche eléctrico del alcalde a pesar de que sus surtidores, y los 300.000 inventados por el alcalde en 2017 menguan a 100.000, pero siguen en la indefinición.
Por ello presentamos una serie de sugerencias que no han sido atendidas: como la compra del edificio de calle Colón 40 para liberar la Catedral – 237.664€-, aparcamiento calle Argén -220.000€- Estas dos actuaciones estaban ya contempladas con anterioridad en el convenio por la recuperación y rehabilitación firmado el 10 de julio de 2014 entre la Conselleria de Infraestructuras y el Ayuntamiento de Segorbe, con una financiación de la Generalitat Valenciana del 80%.
Además, de estas dos propuestas, solicitamos y fueron rechazadas: la adecuación del camino de la Murtera y de la Fuente de los Gallos -60.000€-, recuperación del antiguo pozo de Villatorcas -15.000€-, adquisión nuevo mamógrafo -300.000€- y la renovación y ampliación de la maquinaria del Centro Acuático – 50.000€-.
Ante estos presupuestos sin ambición, inanes, que frenan el crecimiento de Segorbe, los seis concejales del PP, primer partido de la ciudad, han votado en contra.