Es uno de los actos más bonitos, vistosos y coloridos de las Fiestas Patronales de Segorbe, La Enramá, que solo es apta para las personas que madrugadoras o faltas de sueño.
La Enramá es el primer acto festivo de las Fiestas Patronales organizado íntegramente por los componentes de la Comisión de Toros, que tienen como deferencia sacar al desfile con ellos a ellos a las Reinas Mayor e Infantil, Carmen Gómez y Victoria Moya, su Damas y Cortes.
En dicho desfile, en el que han desfilado media docena de carruajes y una decena de jinetes a caballo, los participantes lanzan al público cientos de kilos de caramelos, confetis y pequeños obsequios, a los que este año se han sumado los garrotes en miniatura y balones de plástico repartidos al final del acto.
Así la pereza de los recién salidos del lecho y la falta de sueño de los insomnes llegados de la verbena se han mezclado esta mañana en la tradicional Enramada de Segorbe, que hoy traspasa el ecuador de su Fiestas Patronales con la celebración de la festividad de la Virgen de la Cueva Santa.
La jornada festiva ha comenzado a las siete de la mañana con el disparo de bombas reales desde los dos cerros sobre los que se asienta Segorbe, los de Sopeña y San Blas, además de con un prolongado volteo general de campanas de los doce colosos de bronce de la Catedral-Basílica, a cargo de la Asociación Amigos de las Campanas.
Posteriormente ha tenido lugar la tradicional Enramada por la calle de Colón y plazas de la Cueva Santa y del Obispo Ahedo.
La Enramada es una de las celebraciones más antiguas de la Comunidad Valenciana, aunque actualmente muy pocas poblaciones mantienen viva esta antigua costumbre valenciana que cubre de murta las calles.
Los actos continuaran a medio día con una mascletá en la plaza de la Cueva Santa y esta tarde con una Misa Pontifical y una procesión, entre otros.
Chelo Torrejón – Fotos:José Plasencia